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Alan Turing, el genio, el héroe, el paria.


  
Alan Turing con 16 años.

          

                  Alan Turing nació en Paddington, en Londres, en 1912. Matemático, criptógrafo, filósofo y precursor de la informática moderna. Tuvo especial relevancia en la II Guerra Mundial siendo el encargado de descifrar los códigos nazis, en particular la máquina Enigma, la cual disponía de un cifrado rotatorio, con la utilidad de cifrar y descifrar mensajes. Turing fue uno de los principales artífices dentro del Bletchley Park (que era la instalación militar donde se realizaron los trabajos de descifrados de códigos para descifrar los códigos nazis). Gracias a su habilidad y perspicacia Enigma fue saboteada; para ello Alan diseñó la bombe, que era una máquina electromagnética que destruía gran cantidad de claves enigma candidatas. Se dice que gracias a su descubrimiento la II Guerra mundial acabó al menos dos años antes.
La máquina Enigma.
                Tras el fin de la Guerra Turing siguió en Londres, diseñando en el Laboratorio Nacional de Física uno de los primeros computadores electrónicos programables. También fue decisiva su labor en la contribución a la tesis de la inteligencia artificial, o lo que es lo mismo, si las máquinas podían llegar a pensar.
                Durante los siguientes años no dejó de investigar, así empezó un programa de ajedrez para un ordenador que todavía no existía. También participó con grandes avances en el desarrollo de la cibernética.
                Pero su profesión y su vida personal se vieron truncados cuando en 1952 fue detenido y procesado por su homosexualidad. Turing reconoció su sexualidad, por lo que inmediatamente se le imputaron los cargos de indecencia grave y perversión sexual. Hay que tener en cuenta que las prácticas homosexuales fueron ilegales en el Reino Unido hasta 1967. Turing convencido de que no había hecho nada malo no se defendió de los cargos. En el proceso judicial se le dio la opción de ir a prisión o someterse a una castración química mediante inyecciones de hormonas femeninas, que reducían la libido. El científico escogió esta opción, con el que se inició un proceso de inyecciones de estrógenos que se prolongarían durante un año y que le provocaron cambios físicos evidentes. 
Alan Turing en el muelle.
                En 1954 Alan Turing se suicidó tras ingerir cianuro. Tenía 41 años. En 2009 el Primer ministro Gordon Brown, pidió disculpas en nombre de su gobierno por el trato recibido a Turing. El 24 de diciembre de 2013 y por orden de la Reina Isabel II, Alan Turing recibió el indulto de todo tipo de culpa. 
Indulto firmado por la Reina
PD: Su vida será llevada al cine para noviembre de este año.

Un episodio del Cádiz de las Cortes: Argüelles y el fraile demente.

Agustín Argüelles
 Agustín Argüelles y Álvarez González, diputado por Asturias en las Cortes de Cádiz  es protagonista de esta historia junto a Fray Diego Chacón, el “fraile demente”. Argüelles nació en la localidad asturiana de Ribadesella, el 28 de agosto de 1776. Su gran locuacidad y oratoria le granjeó el apodo de “El Divino”, aunque tuvo otros como “el apóstol de la libertad”, según la Gaceta de Madrid, o el “héroe de la reforma constitucional”, como lo bautizó posteriormente el historiador José Luis Comellas. Fue uno de los principales redactores de la Constitución de 1812, además suyo es el discurso preliminar, aunque se publicó anónimo. Como dato anecdótico decir que el diputado por Asturias feneció en Madrid el 27 de marzo de 1844, en la más absoluta pobreza. Aunque en Cádiz se le recordará por su protagonismo en las Cortes y es que el asturiano tuvo una enorme actividad en las mismas.
Es en mayo de 1811, cuando Argüelles se percata de la situación de nuestro otro protagonista, Fray Diego Chacón. Así en la sesión del 3 de mayo de 1811 informa de un hecho asombroso que ofende, según él, al honor nacional y presenta una proposición que dice así: “Que el Consejo de Regencia remita a las Cortes sin pérdida de momento una exposición individual, sin omitir en ella circunstancia alguna, por leve que parezca sobre lo ocurrido en la noche del corriente en el convento de los padres dominicos de esta ciudad, en donde se descubrió emparedado al religioso Fr. Diego Chacón”. Dicho esto pidió además que el Consejo de Regencia tomase en protección al religioso para evitar cualquier vejación.
El diputado Manuel Martín replicó que Diego Chacón estaba encerrado y no emparedado por estar demente, poniendo como ejemplo que el día anterior había arrojado a la cabeza del prior del convento una jícara (taza) de chocolate. En la sesión del día siguiente, 4 de mayo, se lee la representación del prior del convento de Santo Domingo en la que se explica la situación denunciada sobre fray Diego Chacón. El arzobispo dispuso que su secretario hiciese comparecer al prior y a otros tres religiosos ancianos y de probidad que hubiesen residido más de doce años en este convento, que declarasen sobre el principio y progresos del encierro que sufría aquel religioso, así como de la asistencia que se le había dado en salud y enfermedad para formar juicio exacto de este acontecimiento. Fray Diego Chacón llevaba encarcelado en la habitación que describe el gobernador año y medio. Venía de otra en la que había estado otros cuatro años. Lo  enviaron luego a la casa de sus padres por si el cuidado de ellos podía cooperar a la hora de recobrar su salud y cordura. Pero no fue así. En reiteradas ocasiones intentó matar a su padre, además hirió gravemente a una anciana golpeándola con una piedra, a la que posteriormente se le tuvo que administrar la extremaunción. Por todos estos acontecimientos, la justicia de aquel pueblo (Grazalema) hizo que volviese al convento. 
Imagen de un convento.
 Ya en él, el dictamen de dos médicos, partidarios de declararlo epiléptico de difícil o imposible curación, determinaron que no se presentase a la ordenación de diácono. Así, el prior Fray Manuel Ortiz en 1805, le mandó encerrar en su celda. Lo mismo hizo su sucesor. En la habitación actual tiene la puerta una ventanilla de un tercio de diámetro, por donde se le suministra diariamente la comida. Estaba el techo cubierto de telarañas, tenía una aldabilla y no había señal de haber tenido otra cerradura. Había un colchón con una manta y alguna ropa destrozada del enfermo, sin otro mueble alguno. Junto a la puerta había un asiento, comunicado con el exterior, para el uso de sus necesidades. Tal vez se descuidarían en limpiar el vaso inmundo por el hedor y la humedad que desprendía.
Trasladado por orden del gobernador al departamento de dementes del hospicio de esta ciudad el 2 de mayo de 1811, fue llevado a un aposento donde se le notó en esta ocasión que paseaba hablando solo. Al entrar el maestro de aquel departamento con el desayuno fue atacado por el demente. Costó mucho trabajo reducirlo y sujetarlo, quedando magullados el religioso y el asistente que procuraban sujetarle. Por la tarde lo trasladaron por orden del gobernador al hospital real. Le llevaron a una sala grande. El día 6 por la mañana arrojó furioso el chocolate al sirviente y fue necesario sujetarle con un pie en el cepo. Su furia continúa hasta el día 10 y el desorden en su conversación y acciones, hasta el 14, por lo que no se creyó prudente quitarle el cepo.
Fray Diego Chacón fue encerrado y privado de su libertad porque ya lo exigía así el estado de su demencia, tanto para su seguridad como para la de otros religiosos.
El diputado Canejatomó la palabra para lamentar las deficiencias en las que se encontraba el estado del cuarto de Fr. Chacón. Las telarañas, una ventana que no se abría, falta de aseo, etc. El diputado Nicasio Gallego argumentó que era menester deshacer una equivocación y es que el asunto no vino por habladurías sino por un oficio del gobernador.
El diputado Lera quiso dejar claro en la sesión que la forma de proceder con respecto al caso no fue la correcta,  “porque sin más que por una noticia de un soldado o cadete que dijo que había un religioso emparedado, llevó los alguaciles y tropa, allanó el convento y lo extrajo con escándalo. Me parece que este es un atropellamiento, y a él debe atenderse”.
Discutido el asunto, se deliberó sobre la resolución que debía tomarse. Finalmente el Congreso se conformó con el dictamen del Sr. Anér expresado en la siguiente proposición que quedó aprobada: “Que insertándose en el diario de Cortes el informe del Eminentísimo cardenal, se mande al consejo de Regencia, se sobresea en la causa, y que disponga lo que estime más conveniente en orden a la persona del religioso demente, y al lugar donde en lo sucesivo deba ser custodiado”.
En la sesión del 26 de mayo, Argüelles se lamenta de que no se le esperase en el debate de Fray Diego Chacón, ya que él había sido su promotor. Este incidente es uno de aquellos por los que se tilda al diputado asturiano de anticlerical. Presenta un testimonio del estado lamentable en que se encontró al religioso y es de la opinión de que el informe presentado por el cardenal Borbón no se ajusta a la realidad de los hechos. No obstante acató la resolución de las Cortes poniendo punto y final al asunto.
          Así concluye pues la historia del fraile demente, un caso que al lado de la magnitud de los temas que en las Cortes se trataban puede ser anecdótico o incluso tildado de oportunista, aprovechando Argüelles, según los absolutistas, la oportunidad para atacar al clero. Sea como fuere, era una vida que el diputado pretendía salvar, más allá de una terapia de cuatro paredes y unas telarañas.

Esta es la historia del Huracán.


Rubin Carter era aspirante al título de los pesos medios en 1966 cuando ingresó en prisión. El boxeador cometió el error de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado. Fue acusado de tres asesinatos que no había cometido y condenado de por vida en la cárcel. Estaba de copas con un amigo, cuando la policía los detuvo y sin interrogarlos se los llevaron detenidos, sospechosos de un triple asesinato ocurrido en un bar cercano. Fueron juzgados en una farsa de juicio donde el jurado estaba formado únicamente por hombres blancos. Tengamos en cuenta que el juicio se desarrolló en el contexto de la década de los 60 en Estados Unidos, una época en la que la intolerancia racial llegaba a extremos en los cuales cualquier persona que fuera negra era vista como una persona sin ningún tipo de derechos humanos.
En los años siguientes comenzaron a surgir controversias sobre el caso, relativas a la falta de evidencias y a lo cuestionable de la veracidad de las declaraciones de algunos de los testigos. Es cuando Bob Dylan en 1975 escribe la canción protesta Hurricane para denunciar este injusto episodio. El caso comienza a ganar en repercusión e interés. Carter recibió el apoyo de la comunidad negra y de importantes representantes como Mohamed Alí. Comenzaba así un nuevo litigio por los derechos y la libertad de Rubin Carter. Salieron a la luz cuestiones como el racismo durante el nuevo juicio, también se demostró que hubo corrupción y racismo policial, llegando a coaccionar a testigos y manipular pruebas. En 1985 conseguiría la libertad. En 1988 la fiscalía de Nueva Jersey retiró los cargos contra Carter y Artis. Huracán Carter había permanecido 19 años de injusto presidio.
Rubin Carter dirige la Asociación por la Defensa de los Acusados Injustamente.
«No estoy en la cárcel por asesinato. Estoy en la cárcel porque soy un negro en Estados Unidos de América, donde quienes ostentan poder sólo permitirían a un negro ser un bufón o ser un criminal.»
Rubin Carter, entrevista en 1975.

Black Power

El pasado 4 de Noviembre contemplamos como un senador de raza negra accedía a la presidencia de los EE.UU. Con este motivo, recordamos uno de tantos fenómenos que se produjeron hace 30 años, y que fue conocido como el “Black Power”. Este hecho se produce en las Olimpiadas celebradas en Ciudad de México entre el 12 y el 27 de Octubre de 1968.

A pesar de que hubo un gran número de atletas Estadounidenses que compitieron, hubieron otros que optaron por no acudir a la cita ya que se sentían discriminados por su país, tal es el caso de Lew Alcindor (más conocido como Kareem Adbul-Jabbar).

De todos atletas participantes hubo dos de raza negra que se manifestaron en contra la discriminación racial que azotaba a la «Nación de la libertad y la Democracia».

Los dos héroes fueron Tommy Smith y John Carlos, ambos participaron en la final de 200 lisos el 16 de Octubre, en la cual obtuvieron melladas, Smith oro y Carlos bronce. Fue en el podio donde recibieron las medallas, el lugar idóneo para manifestarse, así cuando sonaba el himno estadounidense, ambos, con los pies descalzos,con un guante negro, levantaron el puño cerradoen alto, al mismo tiempo mantenían la cabeza inclinada y la mirada en el suelo. Acto éste con el cual protestaban ante la situación de discriminación racial existente en EE.UU.

Este hecho recuerda aquel que hicera Jesse Owens en la Olimpiada de Berlín de 1936 en contra de la política antisemita del Partido Nacional Socialista. Tras la conclusión de los Juegos de 1968, tanto Smith como Carlos fueron recriminados a su llegada a los EE.UU. Previamente el COI sostenía la idea de que los dos atletas fueran expulsados de la Villa Olímpica y su negativa a que participaran en competiciones en representación norteamericana.

Fue un alto precio el que pagaron Smith y Carlos, no sólo en el aspecto deportivo sino también en el personal, ya que sus respectivos matrimonios acabaron destruidos por el acoso social al que estaban sometidos. A pesar de todos los problemas, ambos salieron adelante.

Smith encontró trabajo como limpiador de coches en un aparcamiento pero lo despidieron por sus ideales de igualdad de derechos, mas adelante encontró trabajo como entrenador de atletismo. En el presente año estuvo de visita en Madrid como invitado del diaro As donde le fue concedido el premio a los valores universales del deporte. Actualmente tiene 64 años

Respecto a Carlos, sufrió el trauma del suicidio de su mujer, la cual le regaló los guantes negros. En la década de los 80 fue contratado por el Comité Organizador de los JJ.OO. de Los Angeles como mediador de aquellos jóvenes de raza negra ubicados en las zonas marginales de Los Angeles, denominados Negro Ghetto. Smith afirma, que el cambio que se ha producido este 4 de Noviembre era un cambio del que no solo ellos eran partícipes, sino que ya comenzó con Jesse Owens, Rosa Parks y Luther King entre otros… pero aún nadie les ha pedido perdón por lo sucedido tras su acto de 1968.